íšltimamente estoy recibiendo en la consulta a varias personas, que me manifiestan que inesperadamente y sin causa aparente, empiezan a sentir un miedo intenso, o a pensar que algo horrible va a suceder o incluso miedo a morir, impidiéndoles seguir con sus actividades diarias. A continuación detallo los síntomas ya que es de gran ayuda detectarlo a tiempo.
1. Dificultad para respirar.
2. Dolor en el pecho.
3. Palpitaciones.
4. Sudoración extrema.
5. Temblores, sensación de mareo.
6. Inestabilidad física y emocional.
7. Hormigueo en piernas o brazos, o simultáneamente.
8. Nauseas y malestar abdominal.
Por lo general, las crisis duran entre 10 minutos y media hora. Y suelen repetirse ocasionándoles una gran limitación en el desarrollo de las actividades diarias debido a la ansiedad que causan y al miedo a padecer nuevos episodios. Según la OMS el “Trastorno de pánico†afecta al 1,5-3,5% de la población mundial.
Las causas exactas del trastorno de pánico se desconocen. Los factores genéticos y los mecanismos de herencia pueden jugar un papel esencial en su desarrollo así como las vulnerabilidades psíquicas del individuo.
Se relaciona a la influencia de largos períodos de estrés en su aparición y nos explican que cuando se está cansado el cerebro produce lactato de sodio o dióxido de carbono, cuando aumentan los niveles de estos, el cerebro cree erróneamente que se está asfixiando y envía señales para aumentar la tasa de respiración para conseguir más oxigeno y aquí se desencadena un ataque de pánico.
Procuremos encontrar vías de relajación para prevenir este mal que aqueja a la sociedad actual.
2 comments
Nelson E. Becerra says:
May 12, 2013
Hacen cinco años, por primera vez, tuve los síntomas descritos. Un médico de medicina general me curó en seis a ocho días con minerales en líquido y alguna otra
medicina sencilla. En noviembre 2009 por segunda ocasión hasta el momento y tal-
vés en forma más grave se repitieron los síntomas y el estado de stress, pero ahora
conociéndose la causa. Esto he tratado de explicar a cinco o seis médicos del Segu-
ro Social, sin éxito. A comienzos del año 2008 me extrajeron dos piezas dentales
y según lo publicado por un médico local y además la revista «Despertad», la aneste-
sia que usan los dentistas (éllos no lo saben) envenena el cerebro destruyendo algún
mineral importante. Recién la próxima semana trataré de ir donde el médico que me
curó en el 2008, quien, parece, tampoco sabe lo de la anestesia. A comienzos del
2010 me extrajeron la vescícula; no he averiguado si la anestesia general también
afecta el cerebro. En todo caso, la extracción de tres molares con exceso de anestesia
a fines del 2009, produjo el stress grave y alucinaciones que tengo por más de dos
años. Hay que sumar a esto la ingesta de 700 a 800 tabletas de toda clase, inclusive
«Paracetamol» que me ha dañado el hígado. El día viernes último un médico del IESS
me recetó 175 tabletas de seis clases para seis meses.
Sonnia Navas Gafter says:
Ago 6, 2021
Hola, soy Sonnia Navas Gafter, la autora de este artículo, gracias por sus comentarios, este es un trastorno que está muy en boga hoy e inclusive yo estoy haciendo mi tesis de Doctora en Psicología con este tema, subiré más información sobre este tema. ¡Saludos a todos!