Este tema ha sido solicitado por muchos padres de familia de nuestra ciudad quienes me expresan que se sienten confundidos por las nuevas formas de educar a los adolescentes, sostienen que nos hemos ido a polos, que hace algunos anos era casi imposible comunicarse con los padres, quienes imponí­an las reglas pero que hoy por hoy los jóvenes dentro de los sistemas familiares y educativos son los que las establecen.

Fijar lí­mites, poner normas y ejercer la autoridad era hace una generación una tarea mucho más fácil. Norma no cumplida se convertí­a en sanción segura. Los lí­mites eran los mismos, o muy parecidos a nivel familiar y social.

 

Los objetivos de la sociedad coincidí­an con los de la familia.

En la actualidad  una de las más grandes preocupaciones a las que los padres, madres, educadores nos enfrentamos es si estaremos estableciendo normas exageradas para la época o no y si es prudente acoger las actitudes del medio.

 

Esta situación genera, un sentimiento de ineficacia, de culpabilidad que convierte a los adultos en personas permisivas o agresivas lo que dificulta la educación de nuestros adolescentes.

 

A continuación compartiré con Uds. algunas sugerencias :

1.       Fomentemos la expresión de los sentimientos y emociones: esto se logra a través de la música, el arte, el dialogo permanente y frontal entre otros y ayuda a los jóvenes a comunicarse con libertad.

2.       Expresemos reconocimiento: Así­ como la conducta incorrecta merece sanción los buenos actos  deben ser reconocidos, eso les permitirá asumir que la construcción de su autoestima depende de ellos mismos.

3.

Permitir que participe del proceso de establecer las nuevas reglas: a medida que van creciendo las reglas irán cambiando, para ayudarlos en su proceso de madurez es aconsejable compartir con ellos las decisiones, pedir sus opiniones y respetarlas.

4.       Dar ejemplo: Esta es la clave en la formación de los adolescentes, si ellos ven en su entorno respeto a las reglas de convivencia les será muy fácil ejecutarlas, caso contrario estarí­amos trabajando para crear enormes dosis de rebeldí­a.

5.       Capacidad de decisión: es importante que los jóvenes aprendan a tomar decisiones, la carrera que escogerán, su música, deportes, aficiones, etc. deben ser de libre elección pero para ello se los habrá educado desde la infancia .

6.       Justicia, firmeza y consistencia: Evitaremos los adultos tener favoritismos o actuar injustamente ya que eso debilita nuestra autoridad y no olvidemos que las normas y limites ejecutados consistentemente aportan estabilidad emocional, armoní­a y seguridad.